La unidad electroquirúrgica, también conocida como electrobisturí, es un equipo médico que emplea fenómenos eléctricos generadores de calor; con el fin de coagular, fulgurar, desecar o cortar tejidos, dependiendo de los parámetros establecidos por el operador médico. La generación de calor se logra a través del paso de una corriente eléctrica oscilatoria, concentrada en un área pequeña.
La importancia del uso en quirófano de las unidades electroquirúrgicas es que estos dispositivos hoy en día se consideran instrumentos esenciales en estos lugares, debido a que los mismos producen incisiones precisas sin necesidad de ejercer presión en los tejidos, así como también permiten el fácil acceso a áreas difíciles o comprometidas, ofrecen una excelente comodidad en el levantamiento de tejidos hipertróficos, facilitan la contención de hemorragias y la cicatrización de los tejidos gingivales con el correcto uso, y también previenen la infiltración de microorganismos en la línea de incisión.