Un electrobisturí o unidad electroquirúrgica, es un dispositivo médico que transmite energía en forma controlada al tejido vivo con fines quirúrgicos con el fin de cortar, coagular, fulgurar, desecar tejidos, dependiendo de los parámetros establecidos por el operador médico. 

Este instrumento médico es considerado actualmente como un dispositivo esencial en los quirófanos, y la importancia de un electrobisturí radica es que con su uso de obtienen incisiones precisas sin necesidad de ejercer presión en los tejidos, así como también se obtiene fácil acceso a áreas difíciles o comprometidas, permite una excelente comodidad en el levantamiento de tejidos hipertróficos, ayuda en la contención de hemorragias y la cicatrización de los tejidos gingivales con el correcto uso, y también impiden la infiltración de microorganismos en la línea de incisión.

Ventajas de emplear un electrobisturí 

• El electrobisturí disminuye considerablemente el sangrado de los tejidos, con lo cual se evita el uso de gasas, que se ha relacionado con infecciones del sitio quirúrgico.
• Facilita una adecuada asepsia, disminuyendo la probabilidad de transmisión de infecciones de tejidos enfermos a sanos.
• Permite un ahorro de tiempo considerable.
• Ofrecen variedad en la instrumentación adecuada para cada acto quirúrgico.

Funcionamiento de un electrobisturí

El electrobisturí o unidad electroquirúrgica, hace circular corriente de alta frecuencia e intensidad moderada o elevada entre dos electrodos aplicados al cuerpo. Esto ocasiona que se genere calor en el lugar aplicado y se corte (lo que se conoce como electrosección) o coagule (electrocoagulación) el tejido. En otras palabras, este equipo utiliza la energía eléctrica de alta frecuencia para crear calor, con el fin de coagular o cortar tejidos biológicos. Las frecuencias empleadas se encuentran por encima de 200.000 Hz esto hace que no interfieran con los procesos nerviosos, ya que solo producen calor.

La energía calorífica proviene de los electrones desplazándose de los átomos a razón de una diferencia de potencial eléctrica (es decir, su movimiento desde la zona de mayor cantidad de electrones a una de menor cantidad de electrones); este movimiento de partículas produce fotones que poseen energía, la cual se transforma en energía calorífica.

La impedancia, o resistencia al paso de electrones, que presentan los tejidos, se manifiesta con un aumento del calor, que es lo que ocasiona el efecto deseado. Así, con una onda eléctrica sin modular, se genera un corte puro, pero si la onda se modula o interrumpe, se obtiene coagulación. El paciente forma parte del circuito eléctrico que conforma el equipo de la electrocirugía, por lo tanto, el uso inadecuado, puede llegar a producir quemaduras.

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